“Quiero decir que a María José la pudimos encontrar gracias a las Abuelas. Porque si no me hubiera unido al grupo, no la hubiera encontrado. Solas no hubiésemos logrado nada”, decía Haydeé. Porteña de nacimiento, trabajó en la sección de sastrería de la reconocida Casa Muñoz, donde conoció a quien sería su marido, Alberto Lemos. El terrorismo de Estado le arrebató a dos de sus tres hijos, Mónica y Gustavo. La tercera, María, pudo exiliarse en Brasil. Crió a sus nietas María y María José. Vivió hasta los 100 años
"Una señora me agarró y me dijo que por qué no iba a la Plaza de Mayo que había madres que se estaban juntando"